Exclusivo
Farándula

Los cuatro creadores de contenido dentro del night club donde a diario graban los videos.JONATHAN YANEZ

En Crucita: Chongo es usado para crear contenidos polémicos en Tiktok

Los videos reflejan la vida de las trabajadoras sexuales. Las influencers aclaran no ser 'cariñosas', cuando llegan en busca de un ‘palito’ con ellas

Lo que para muchos es un sitio de diversión nocturna, para cuatro amigos se convirtió en un escenario de creatividad, reflexión y éxito digital. En el corazón de Crucita, parroquia costera de Portoviejo, dos hombres y dos mujeres decidieron transformar un centro de tolerancia, mejor conocido en el lenguaje popular como ‘chongo’, en una plataforma de contenido viral.

Jonathan Roberto Yánez Gómez, de 38 años, es uno de los rostros visibles de este fenómeno que nadie veía venir y que ha logrado conseguir a través de sus videos, cientos de miles de seguidores y millones de vistas.

Lee también: Roberto Angelelli: La televisión le dio la espalda

Con su característica forma de vestir, al estilo vaquero, junto a su hermano Israel, de 35, lideran un equipo que ha hecho del morbo, la picardía y la crudeza de la vida nocturna de las trabajadoras sexuales, un relato visual cotidiano. Aunque nacieron en Portoviejo, desde los nueve años viven en Crucita, donde actualmente administran el negocio familiar, un night club llamado John Larry.

"Mi papá era joyero y relojero profesional, pero luego dejó todo para poner hace más de 30 años el nightclub. Desde entonces, vivimos de esto", relata Jonathan, sin tapujos.

Crecimiento inesperado de seguidores y vistas

La idea de hacer contenido nació hace cuatro años, en Facebook, pero fue solo hace seis meses que decidieron incluir directamente historias y escenas desde el centro de tolerancia. El crecimiento fue tan meteórico como inesperado.

Diana y Angélica son dos influencers a quienes confunden como trabajadoras sexuales.JONATHAN YANEZ

El equipo creativo incluye a personajes que hoy son virales, como Angélica María Pinargote, de 33 años, conocida como “La colorada chonguera” y Diana María Ponce, a quien el público reconoce como “María la Chonguera”. Ambas confiesan que comenzaron algo nerviosas frente a las cámaras, actualmente son las protagonistas de escenas realistas.

"Empezamos con videos de reflexión, pero al público no le gustó"Jonathan Yánez

Cuando Diana, de 38 años, entró al grupo y cambió su nombre para mover las redes, aquello le trajo problemas no solo con sus padres, sino además con su novio. “El día en que me puse ‘María La Chonguera’, en mi casa se molestaron y mi novio rompió la relación, porque decían que yo me dedicaba al trabajo sexual, cuando no es así. No soy ‘cariñosa’, solo hago mi trabajo para redes. Aquí mucha gente me conoce, trabajo con marcas que me contratan”, explicó.

A la gente le atrae el morbo

¿Por qué hacer contenido sexual o morboso? "A la gente le gusta el morbo, nosotros empezamos con videos de reflexión. Mostrábamos casos de niños, pero al público no le gustó. Entonces decidimos darle un giro al contenido y contar verdaderas historias de prostitución y del mundo nocturno. Cuando el algoritmo lo detecta, lo hace explotar en redes", afirma Jonathan.

Agrega que el trasfondo del trabajo va más allá y no quedarse solo en las escenas de morbo, sino dejar un mensaje. Según los creadores, muchos de los videos se basan en vivencias reales que ven a diario dentro del negocio: clientes que no quieren pagar, mujeres que usan brujería para retener hombres, maltrato a trabajadoras sexuales por parte de los dueños del local o de sus ‘chulos’, e incluso violencia física, con la diferencia de que todo es actuado.

"Las historias que contamos son 100% verídicas"Angélica Pinargote

"Las historias que contamos son 100% verídicas. A veces las chicas que trabajan en el night club nos cuentan algo que les pasó y con eso ya tenemos un video", explica Angélica. Arman el guion, y el resto es natural.

El impacto ha sido tal que incluso los dueños de otros chongos, así como las trabajadoras sexuales las buscan y las siguen. “Nos dicen ‘nos sentimos identificadas’”, cuenta Diana.

Confusión entre ficción y realidad

El realismo de la trama y las actuaciones han provocado reacciones inesperadas. Hay quienes insultan en la calle a Jonathan y a Israel acusándolos de maltratadores. “Nos metemos tanto en el papel que la gente cree que es verdad todo lo malo que ven en las escenas, pero insisto, todo es actuado. Las chicas son creadoras de contenido”, señalan.

Los amigos también personifican a 'El patrón de la flores', un vaquero que llega con regalos y arreglos florales para la cumpleañera,Cortesía

Lo curioso es que al night club llegan muchos clientes a preguntar por los servicios de ‘las actrices’ Diana y Angélica. “Vienen directo a preguntar en qué cuarto están las chicas, pero les decimos que ellas no son trabajadoras sexuales”, afirma Jonathan entre risas.

Aunque los cuatros viven de la monetización de los videos, el mayor de los Yánez, conocido en las redes como Acuaman, dice no hacerle asco al trabajo. Además de grabar contenido, hace fletes en su carro, mientras que su hermano Israel trabaja en su tricimoto, y forma parte de una cooperativa de transporte local. Juntos manejan otro negocio conocido como ‘El patrón de las flores’, un hombre disfrazado de vaquero que llega a su destino, llevándole regalos y un arreglo floral a la agasajada.

Asegura que así como hay gente que los critica, también hay otros que los apoyan, ya que el objetivo es reflexionar. “Mostrar, desde el humor o el drama, una vida que pocos conocen, pero muchos juzgan”, confiesa, mientras acaricia su larga cabellera, un distintivo personal.

Hombres y mujeres se conectan a los 'retos candentes'

El momento más viral es en la madrugada cuando Jonathan y Diana inician con los retos por medio de en vivos. Él le va pidiendo qué haga ciertos actos candentes y de esa manera logran conectar y enganchar a cientos de miles de usuarios que se unen al live.

Angélica se hizo viral por mostrar los senos, en noviembre de 2024, en el estadio Reales Tamarindos de Portoviejo.Cortesía

”Eso es una locura. Se conectan tanto hombres como mujeres. Aunque no lo crea, a ellas también les gusta el morbo y lo disfrutan”, asegura Jonathan.

Los cuatro manejan diferentes cuentas, sobre todo, en TikTok, ya que varias veces la red se las ‘ha tumbado’ por infringir las reglas comunitarias. “Si nos tumban una, rápido nos conectamos con otra y así...”, dice Israel. Diana maneja cinco cuentas, en total mueve a un millón de seguidores.

Si quieres leer más notas de EXTRA, haz click aquí