Traumatismos orbitarios
Cuando sufrimos un traumatismo en el globo ocular podemos acabar con una rotura de las paredes óseas de su órbita; es decir, de la lámina papirácea del etmoides o del suelo de la propia órbita, ya que la fuerza del impacto acaba transmitiéndose a todas las estructuras. Este tipo de golpes suelen recibirse en ámbitos como el deporte, en accidentes de tráfico o siendo víctimas de agresiones físicas como tras un puñetazo o una simple caída. Para reparar las zonas afectadas o fracturadas y evitar el riesgo de que se produzca daño en el nervio óptico músculo del ojo atrapado que provoca visión doble, nuestros profesionales harán un diagnóstico personalizado a través de la realización de una TAC orbitario que nos guiará en el tratamiento que le devolverá la integridad a la pared orbitaria dañada.
Tecnología de la especialidad
Autorefractómetro
El autorefractómetro se utiliza para medir la graduación del paciente de manera automatizada. Se emplea para estudiar la miopía, el astigmatismo y la hipermetropía y en el estudio preoperatorio de cualquier clase.
El autorefractómetro permite realizar mediciones rápidas, precisas y fiables con pupilas de hasta Ø 2mm y también permite realizar mediciones de anillo KRT más profundas y tomar mediciones KRT periféricas del radio de la córnea.
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