Limpieza de PC y Mac

En primavera, después de un largo invierno, con las temperaturas menos rígidas, en vista del verano nos entran ganas de hacer una limpieza general en nuestras casas y en nuestras vidas. Pues, la primavera también es la estación ideal para hacer un poco de orden y limpieza también en PCs y portátiles.

Para que vuestros sistemas vuelvan a las grandes prestaciones del principio, hay que deshacerse de todos los programas innecesarios acumulados durante meses de uso y que ralentizan el equipo. Siguiendo esta breve guía, haréis que vuestro ordenador vuelva como nuevo.

1. Eliminar los programas que no se utilizan: primero, es fundamental desinstalar del sistema todos los programas a los que no accedéis desde hace tiempo. Para elegir los programas en un equipo Mac, basta ir a Aplicaciones y visualizar los elementos por fecha, para individuar los programas que no se utilizan a menudo. Si tenéis un PC, hace falta entrar en Panel de control, hacer clic en Programas y filtrar por fecha de instalación. Podéis visualizar los programas que habéis instalado hace poco tiempo, elegir los que utilizáis pocos y desinstalar los que no necesitáis.

2. Actualizar los programas que sí se utilizan: por razones de funcionalidad y prestaciones, es importante que tengáis las versiones más recientes de todos los programas, incluso los navegadores y el sistema operativo. Algunos programas se actualizan automáticamente; los que no, tenéis que actualizarlos vosotros mismos y lo más pronto posible. También el software antivirus.

3. Limpiar el escritorio: vuestro escritorio poco a poco se llena de archivos y descargas; en realidad en el escritorio deberían permanecer solo unos pocos programas. Cuantas más cosas hay en el escritorio, más lento será el sistema. Echad un vistazo al escritorio, elegid solo los programas y los archivos absolutamente necesarios, eliminad los que ya no necesitáis y cread carpetas en el sistema donde colocar los archivos.

4. Reducir al mínimo los programas que se lanzan automáticamente al arranque del equipo: es muy probable que, al iniciar el equipo, arranquen automáticamente más programas de lo necesario. Todas estas aplicaciones ralentizan la fase de arranque del equipo. Si tenéis un PC, teclead ‘msconfig’ en la barra de búsqueda que aparece al pulsar el botón de Inicio; seleccionad el icono, entrad en la pestaña general y seleccionad la opción de cargar solo los dispositivos y servicios básicos. Si utilizáis un equipo Mac, tenéis que entrar en Preferencias del Sistema y luego en Usuarios y grupos; seleccionar vuestro nombre de usuario y acceder a Elementos de inicio desde la cuenta. En ambos sistemas operativos, si no sabéis para qué sirve un determinado programa, mejor no desactivarlo, podría ser muy importante para el arranque. En cambio, no es necesario que programas como Dropbox o Spotify arranquen automáticamente así que se pueden deseleccionar sin problemas.

5. Hacer una limpieza general de los navegadores: antes que nada, os aconsejamos borrar el historial de descargas, memoria caché y páginas visitadas. Hay que tener en cuenta que podríais perder información como nombres de usuario y contraseñas, aunque algunos navegadores os permiten guardar estos datos. En Firefox, entrando en el menú y luego en la sección Historial, tenéis que hacer clic en la opción de borrar. Se abrirá  una pestaña donde podréis elegir entre diferentes funcionalidades, como borrar todo lo que se ha guardado en el historial durante la última hora. Entre las varias opciones, os aconsejamos elegir la de borrar todo. El procedimiento es parecido para todos los navegadores.

6. Desfragmentar el disco duro: esta utilidad para sistemas operativos Windows aumenta la velocidad y la eficiencia del sistema. En Windows 8 hace falta buscar ‘defrag’ entre los archivos; en los sistemas más antiguos, tenéis que entrar en ‘Archivos de programa’, luego en ‘Accesorios’, ‘Herramientas de sistema’ y ahí encontraréis la opción. Hay que tener en cuenta que la operación de desfragmentar el disco lleva mucho tiempo y durante el proceso no se puede usar el equipo, así que os aconsejamos empezar esta operación antes de ir a dormir. Para los equipos Mac existe una opción parecida que se llama Utilidad de discos.

7. Hacer una copia de seguridad de los archivos: mejor utilizar un disco duro externo o un servicio de almacenamiento de datos en la nube y realizar una copia de los archivos más importantes. Guardad la información más sensible en un disco duro externo que utilizáis exclusivamente para las copias de seguridad y que no conectáis a ningún otro sistema. En cualquier caso, podéis programar copias de seguridad y adoptar la costumbre de hacer manualmente copias de seguridad de los datos más importantes.

8. Elegir nuevas contraseñas: para que vuestro equipo esté siempre bien protegido, elegid de vez en cuando nuevas contraseñas.  No hay mejor ocasión que hacerlo si ya estáis poniendo al día el equipo entero. Cuanto más largas sean las contraseñas mejor; además, deberían comprender números y símbolos no alfanuméricos y no deberían contener palabras que se encuentren en el diccionario.

9. Limpiar literalmente el equipo: al usarlo, el ordenador se ensucia mucho. De vez en cuando, elimina el polvo, las migas  y toda la suciedad que se ha ido acumulando durante los meses. Un bote de aire comprimido y un paño específico para pantallas son herramientas fundamentales.