¿Escogemos coches diferentes hombres y mujeres?

Cuando se pregunta a los vendedores de coches si más o menos saben qué les va a pedir cada cliente cuando entra por la puerta, la mayoría dicen que pueden adivinarlo en un alto porcentaje de casos en función del coche que ya traen, de quién les acompañe y también de su sexo.

Por supuesto, los estereotipos están para romperse y cada vez sucede más a menudo, pero ellos siguen afirmando que hay ciertos coches que han sido creados para hombres y otros para mujeres. Esto no quiere decir que todos los vehículos tengan ese componente femenino o masculino, pero algunos modelos en concreto sí están enfocados para un cierto público.

Cuando alguien acude buscando un ford de ocasion en coruña, el vendedor tiene ciertos prototipos trazados en su mente:

-Hombre joven, quiere coche deportivo de gran cilindrada y le preocupa mucho su línea y el modelo en concreto. Compra mucho por los ojos y no les importa adquirir un vehículo con muchos kilómetros si es el modelo que desean.

-Mujer joven quiere un coche pequeño, que le resulte fácil de manejar, le preocupa el consumo y también la línea. Pero de una manera diferente a los hombres. Ellas no se preocupan tanto por los alerones o las llantas y miran más el diseño en general.

-Al llegar a la edad madura los gustos se van haciendo cada vez más similares, aunque ellos siguen prefiriendo los coches de líneas más deportivas y ellas suelen tener una predilección por los modelos familiares y los monovolúmenes.

¿Quiere esto decir que a las mujeres no les gustan los coches deportivos? Por supuesto que no, les gustan y mucho y también los adquieren. Pero en un porcentaje mayor que los hombres ponen en la balanza otros aspectos. Son esencialmente más prácticas y están dispuestas a comprar un coche que no estuviera en sus planes si se trata de una buena oportunidad, como un seminuevo a un buen precio.

El aspecto más ecológico del vehículo, como si tiene un motor más o menos contaminante, suele preocupar más a los más jóvenes y aquí también son ellas las que muestran una conciencia más ecológica, aunque ambos sexos muestra cada vez más interés por este tema. Ellas están un poco más dispuestas a pagar un poco más por un coche más ecológico o a renunciar a un poco de potencia a favor del medio ambiente.