MÉXICO, D.F. (apro).- Con la salida de la “vieja guardia” y una serie de reacomodos en su equipo de colaboradores cercanos, el presidente Enrique Peña Nieto formalizó los cambios en su gabinete, para iniciar la segunda mitad de su periodo. A cuatro días de que presente su tercer informe de gobierno, momento considerado políticamente el justo medio de la administración, el mandatario designó a dos miembros de familias de expresidentes como secretarios de Estado, al nombrar canciller a Claudia Ruiz Massieu Salinas -hija del asesinado José Francisco Ruiz Massieu y sobrina de Carlos Salinas de Gortari-, quien hasta hoy se desempeñó como titular de Turismo, dependencia esta última a donde llegó Enrique de la Madrid Cordero, hijo del extinto Miguel de la Madrid Hurtado. En tanto, José Antonio Meade Kuribreña, quien hasta hoy fue secretario de Relaciones Exteriores, fue nombrado titular de Desarrollo Social, al tiempo que la hasta hoy secretaria de ese ramo, Rosario Robles Berlanga, asumió como titular en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). La mayor parte de la “vieja guardia” priista que acompañó a Peña Nieto desde la construcción de su candidatura presidencial y en el primer nivel durante los casi tres años de gobierno, fue despedida hoy sin que se les acomodara en cargo alguno. Se trata de los ahora exsecretarios de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor; de Agricultura, Enrique Martínez y Martínez; de Sedatu, Jesús Murillo Karam, y el de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan José Guerra Abud. Excepto este último, los funcionarios salientes ya no acudieron al acto de relevos. Los cambios favorecieron a la generación más próxima a Peña Nieto, personificada en Aurelio Nuño Meyer, hasta hoy jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, quien entró al relevo de Chuayffet; en la oficina de la Presidencia fue nombrado Francisco Guzmán Ortiz, quien fungía como coordinador de asesores del primer mandatario. En Agricultura fue designado el gobernador con licencia de Querétaro, José Calzada Rovirosa quien, a punto de concluir su administración en esa entidad, solicitó licencia para incorporarse al gabinete federal. Como secretario de Medio Ambiente, Peña designó a Rafael Pacchiano Alemán, también del círculo cercano al presidente, esposo de la encargada de la Estrategia Digital del gobierno, Alejandra Lagunes. Uno más de los cambios apuntó a la salida de Monte Alejandro Rubido García, quien hasta hoy se desempeñó al frente de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), a donde llega Renato Sales Heredia. Finalmente, la dirección general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) fue asumida por el exgobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza Terrazas, quien hasta hoy estuvo al frente del Fondo de Vivienda de dicho organismo. Desde el 23 de mayo, cuando falleció el director del ISSSTE Sebastián Lerdo de Tejada, en el organismo fungió como encargado de despacho Luis Antonio Godina Herrera. En el salón “Adolfo López Mateos” de la residencia oficial de Los Pinos, Peña Nieto agradeció “los servicios” que los salientes prestaron al país y llamó a los nuevos funcionarios a ser eficientes, honestos y transparentes, a que se conduzcan con respeto a la ley, rectitud, profesionalismo y compromiso por México, para finalmente tomarles la protesta de ley.