Repudian vecinos de la Cuauhtémoc políticas de Mancera: “compromete seguridad para captar inversiones”

Por: Cecilia Balderas / 5 septiembre, 2015

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(05 de septiembre, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Vecinos de diversas colonias de la delegación Cuauhtémoc, organizados en el movimiento “Juárez no ha muerto”, calificaron de erróneas las políticas implementadas por el Gobierno del Distrito Federal (GDF) en materia de desarrollo urbano, pues en aras de “captar inversiones, generar empleos y rescatar espacios y predios subutilizados”, impulsa negocios inmobiliarios que comprometen su patrimonio e incluso su seguridad personal.

Natalia Reyes, integrante de la asociación de vecinos, denunció que la administración capitalina, encabezada por Miguel Ángel Mancera, ha violado su legítimo derecho a recibir información oportuna y transparente respecto a los planes, programas y demás acciones que impulsa la administración local y que además pretende limitar y tergiversar los derechos y garantías contenidas en la Ley de Participación Ciudadana del Distrito Federal, que garantiza que pueden expresar su opinión libremente y que ésta sea considerada durante la planeación, operación y evaluación de las políticas gubernamentales.

Los vecinos de colonias como Juárez, Roma, Centro y Doctores se manifestaron en contra de la construcción de las cinco Zonas de Desarrollo Económico y Social (ZODES), por considerar que se trata de negocios multimillonarios que pretenden realizarse a costa de la tranquilidad y del arraigo vecinal, particularmente con el pretendido desarrollo del Centro de Transferencia Modal (CETRAM) Chapultepec, el Corredor Cultural Chapultepec y la llamada Ciudad Administrativa.

Reyes argumentó que además de los proyectos antes mencionados, la construcción de las 10 torres construidas en los últimos años sobre paseo de la Reforma, de hasta 58 pisos, y las tres restantes que todavía están en desarrollo –uno de ellos la Torre Reforma, que se prevé tendrá 280 metros de altura y será el edificio más grande del país- preocupan por la introducción del uso de gas natural de la compañía Fenosa en varias colonias aledañas.

“Pareciera que el jefe de gobierno, sus secretarios y su equipo de asesores carecen de memoria. Durante los sismos de 1985 se derrumbaron en nuestras calles cientos de edificios. Es de todos sabido que la zona centro de la ciudad se asienta sobre el terreno fangoso de lo que fuera el lago de Texcoco; también es de dominio público que la extracción de aguas freáticas, durante la construcción de los megaproyectos, ha provocado severos hundimientos y socavones que afectan las edificaciones próximas y la infraestructura urbana”, señaló Natalia Reyes.

Gas natural, principal preocupación

El principal motivo de preocupación de los vecinos de la delegación Cuauhtémoc es la inclusión de tuberías de gas natural en las construcciones nuevas de la zona que, según la experiencia previa, es muy vulnerable a un sismo o fuerte temblor, por confluir en ella fallas geológicas.

En el sismo de 1985 se registró la fractura de tuberías de agua potable y desagüe que generaron fugas que permanecieron sin ser reparadas varios días, por lo que los inconformes no están seguros de la conveniencia de que las nuevas construcciones utilicen los sistemas de conducción de la empresa Fenosa y más aún, si este tipo de materiales tendrá la resistencia necesaria para soportar un fenómeno natural similar o peor al de hace 30 años.

El gas natural carece del olor característico del Gas LP, por lo que de registrarse una fuga, ésta podría no ser detectada a tiempo.

Situaciones de este tipo han sucedido ya. El pasado 29 de marzo de 2011, personal de la delegación Cuauhtémoc y de las agencias siete y ocho del Ministerio Público fueron evacuados de sus centros de trabajo ubicados en la colonia Buenavista, luego de que trabajadores del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, quienes trabajaban en la reparación de una fuga con una máquina excavadora, perforaron por accidente un tubo de gas natural.

La propagación del combustible provocó que varias personas que inhalaron el gas experimentaran mareos al interior de sus oficinas.

Información e inclusión, la exigencia

Ante tal escenario, los vecinos del movimiento “Juárez no ha muerto” solicitan se hagan públicos los estudios de impacto ambiental que la empresa Fenosa debió realizar antes de introducir las tuberías en varias colonias de la zona centro de la Ciudad de México, así como los que deben realizarse para el Corredor Cultural Chapultepec y las 13 torres de Paseo de la Reforma.

Reyes informó que los habitantes de la zona también quieren tener conocimiento sobre los estudios de mecánica de suelos, para pedir que se verifique por expertos si las tuberías de gas natural tienen las características necesarias para utilizarlas en el subsuelo de la región, además de un estudio para prever si habrán afectaciones a las construcciones contiguas a las torres y otros proyectos en desarrollo si un sismo o temblor de fuerte magnitud se presentara.

El movimiento solicita se hagan públicos los estudios de vialidad que deben asegurar que la concentración demográfica en el área no generará más embotellamientos en las horas de mayor tránsito, un compromiso de las empresas para resarcir los daños que cada proyecto pudiese causar a los vecinos, además de que el Gobierno del Distrito Federal garantice servicios como recolección de basura, agua y drenaje para quienes habitarán y trabajarán en las nuevas construcciones.

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