Está claro que para gustos, los colores, pero hay cosas en las bodas que ya empiezan a «oler» de todo lo que se repiten. Está muy bien que copiéis ideas de todas a las ceremonias que vais, pero también le tenéis que dar ese toque personal vuestro. Los mejores consejos para una boda.
La regla no escrita por excelencia en una boda es que SOLO la novia puede ir de blanco. Por eso este color está prohibido para el resto de invitad@s. Y quien dice blanco dice toda la amplia gama de blancos y similares.
Consejos para una boda
La entrada triunfal al banquete es un momento muy emotivo para la nueva pareja, por eso son muy variadas e incluso épicas las formas de entrar al restaurante. La imaginación no tiene límite y aquí es el momento de demostrarlo, pero por favor, no entréis en coche de caballos. Está muy visto, pero oye, si os hace ilusión, adelante.
Corazones hasta en la sopa. Si os casáis es porque estáis muy enamorados, por eso no hace falta corroborarlo con corazones a cada dos pasos que damos. Eso de que «menos es más» en este caso es cierto al 100%. Algún que otro corazón puede estar bien, pero corazón sobre corazón sobre corazón NO. Y por supuesto, comida en forma de corazón tampoco. Puede resultar muy cuqui pero los invitados terminarán vomitando arcoiris y estornudando confeti.
Cortar la tarta con una espada. Menos mal que pasó la época «tengo complejo de caballero y quiero cortar la tarta con una espada». Son modas por las que muchos han pasado, unos por gusto y otros casi por obligación, pero ya está, ya pasó. Haceros la foto de rigor con la tarta y luego ya que sean los camareros los encargados de cortarla.
Los regalos. Poco a poco se va viendo más variedad de regalos para ellas. Para ellos seguimos estancados en los puros o botellitas de licor en su defecto. Sabemos que es muy difícil dar con un regalo universal para todas las mujeres de una boda, pero los cigarillos y los alfileres no. Hay que comerse un poquito la cabeza si quieres que tus invitad@s se queden con la boca abierta al ver el recuerdo que van a tener vuestro.
¿Y que me decís de la tradición (y cada vez más pasada) de cortar la liga de la novia y la corbata del novio? Sabemos que la boda os ha costado mucho dinero y que os tenéis que recuperar poco a poco de la inversión, pero en serio, no destrozáis dos prendas que han costado lo suyo para que los invitad@s lo tengan de recuerdo, que ellos también han tenido que hacer un pequeño desembolso en vuestro regalo de novios y en sus trajes. Un poquito de piedad.
