Como aficionado al deporte, he seguido de cerca los Juegos Olímpicos de Río este verano y ahora también los Paralímpicos, que son aún más impresionantes y épicos por las dosis de esfuerzo y superación que requieren.

Ver nadar a Israel Oliver o a María Delgado, pedalear a Alfonso Cabello o jugar al equipo de baloncesto en silla de ruedas es de las cosas más impresionantes que uno puede ver por televisión.

Por eso el otro día me llevé un disgusto cuando leí que la cuantía de los premios económicos que reciben nuestros deportistas paralímipicos es tres veces menor que las de los atletas olímpicos. Así, el premio por recibir una medalla de oro olímpica es de 94.000 euros, mientras que el oro paralímpico está recompensado con 30.000 euros. En el caso de la plata, son 48.000 frente a 15.000. Y 30.000 frente a 9.000 en bronce. En las pruebas por equipos ocurre algo similar.

No es justo que estos atletas no tengan el reconocimiento económico que se merecen cuando tampoco tienen el mediático. Por lo menos que las entidades públicas reconozcan lo que los medios de comunicación no reconocen.

Es cierto que el Comité Paralímpico Español triplicó las cuantías económicas de los premios para los Juegos Paralímpicos de Río: en Londres 2012 y Pekín 2008 fueron de 10.000 euros por la medalla de oro; 5.000 por la de plata y 3.000 por la de bronce. Pero también es cierto que los atletas paralímpicos se entrenan igual que los olímpicos, enfrentándose a muchos obstáculos adicionales (escasez de ayudas, menos patrocinadores, etc.).

Si queremos igualdad real, el esfuerzo de todos debe premiarse de la misma forma. Por eso he iniciado esta petición para reclamar al Comité Olímpico, al Comité Paralímpico Español y al Consejo Superior de Deportes que igualen la cuantía de los premios para sus atletas, como ya ocurre en países como India.

Si somos muchos los que firmamos esta petición, estoy seguro de que lo conseguiremos, porque ellos mismo ya deben saber que el sistema de premios actual no es muy justo.