La birome BIC Cristal es la más vendida en todo el mundo. En el 2004 alcanzó la cifra récord de cien mil millones de unidades vendidas.

Pero, al usar un bolígrafo BIC, no se ha preguntado ¿para qué sirven los agujeros que encontramos en su cuerpo? Pues aquí la respuesta:

A muchos niños, e inclusive a una cierta cantidad de adultos, les encanta morder el capuchón de las lapiceras, ya sea cuando están concentrados en algo o sencillamente se encuentran ansiosos y nerviosos. Al tener la tapa de la pluma en la boca puede pasar algún accidente y fácilmente se puede ir a la traquea y bloquear su respiración.

Es en ese momento en el que ese hoyito cumple su función al permitir que una mínima pero suficiente cantidad de oxígeno llegue a los pulmones y la persona pueda respirar; un tiempo considerable mientras espera la llegada de la atención médica.

En base a esto la mayoría de los fabricantes de bolígrafos adoptó esta medida de seguridad en sus capuchones, y el Instituto Británico de Estándares modificó las recomendaciones para la fabricación y producción de este elemento del uso diario.

Otras de las cuestiones es regular la presión interna del bolígrafo. Si no existiera ese pequeño agujero en el cuerpo del bolígrafo, estaría totalmente sellado, por lo que la presión en su interior podría ser diferente a la del exterior del bolígrafo. ¿Por qué importa esto? Porque, en caso de desigualdad de presión, se produciría una fuga de tinta procedente del pequeño tubo de plástico que la contiene en el interior de la birome.