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Series que cargan con el éxito de sus “madres”
Algunas spin off de series famosas no terminan de cuajar entre el público.
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FOTOS CORTESÍA fox, netflix, nbc.
04 de marzo de 2015
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El pasado 8 de febrero se estrenó en el canal AMC: Better call Saul, hija de la aclamada serie Breaking bad, es decir, una spin off.
La cadena espera que así como la historia del maestro traficante de drogas fue aclamada por la crítica, la vida del abogado Saul Goodman tenga un buen rating.
Pero, ¿qué es una spin off? En la televisión, así se nombran a las producciones que derivan de otras, ya sea que usen un personaje relevante o que los hechos sucedan en el mismo universo de la serie original. Nacen porque la historia de donde surgen tuvo gran éxito, pero como pasa con los hijos de los futbolistas, no siempre heredan el talento de sus padres.
Salidas en falso
Friends, una de la serie más aclamada de la televisión con 10 temporadas (1994 a 2004), tuvo su spin off.
Joey fue el nombre de aquel programa que tan solo duró dos temporadas (2004-2006) y que no fue ni la sombra de lo que generaron las aventuras de Chandler, Mónica, Ross, Phoebe, Rachel y el mismo Joey, protagonista de la spin off.
Para el analista de cine y televisión Jerónimo Rivera, las series derivadas cargan con el éxito del programa original. “No podemos generalizar, pues hay spin off que tuvieron suceso. Sin embargo, aquel programa cuando estrena su primer capítulo, en verdad no es el primero, ya que carga con los episodios del programa original, un lastre que el público tendrá en cuenta y que no demorará en criticar”, sostiene.
Sex and the city, serie exitosa que transmitió HBO desde 1998 hasta 2004, tuvo también a su hija llamada The Carrie diaries, comedia que no cautivó a los fanáticos de su predecesora y solo duró un par de temporadas.
¿Por qué?
En ocasiones la falta de publicidad también golpea este tipo de producciones, y por ello no alcanza la audiencia de su serie madre.
“Lo ideal sería tener un punto de equilibrio. Que la spin off no se aleje demasiado de la serie original tanto en mercadeo como en su historia, lo que es muy difícil”, asegura el crítico Rafael París.
Sin embargo, no todas son series para olvidar. Un ejemplo fue la comedia Cheers que se transmitió en 1982 por NBC y que dio a luz a Frasier, su spin off.
La primera se enfocaba en la vida de unos amigos que se divertían en el bar que daba nombre al programa. Mientras que Frasier, emitida desde 1993 hasta 2004, contaba la historia de uno de sus protagonistas, el psiquiatra Frasier Crane.
Las dos duraron once temporadas, lo que convierte a Frasier tal vez en la spin off más exitosa. ¿Cuál fue su fórmula? Esa es la pregunta que deben hacerse los realizadores de las futuras spin off.
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