¿Qué es el wayfinding?

Ya os hablamos hace tiempo de la tendencia que hay ahora de ponerle nombrajos raros a cualquier cosa, sobre todo en el mundillo del diseño y de las nuevas tecnologías. Ahora si usas palabrejas como branding, flawless o mainstream eres mucho más cool. ¡Sorry! Así es la vida.

Pues hoy os traemos una prima hermana… pero no para que seáis los más modernos del lugar al pronunciarla –que también- sino para que veáis lo molón del concepto. Porque en pronunciación no sé como vais, pero en diseño hay que ir renovándose a diario.

¿Sabéis lo que es el wayfinding? Sí, sí.. wayfinding. No es sencillo pronunciarla, pero tampoco es fácil hablaros de ella.

Para empezar, al ser una palabra en inglés no tiene una traducción exacta al español. Es algo así como «encontrar el camino», pero esta traducción literal no termina de transmitir la idea. Realmente es una forma de tener en cuenta el diseño dentro de los entornos, un proceso de orientación y movilidad formado por la percepción, la cognición y la interacción entre la persona y el medio físico. ¡No es moco de pavo!

El wayfinding es un ente visual que se maneja entre el ser humano y la forma de desenvolverse en un espacio determinado. Y no, no es el rollo Poltergeist que te estás imaginando ahora.

¿En qué se basa el wayfinding?

Vamos a ponernos un poco técnicos y vamos a intentar dejar la locura al lado. (A ver… seriedad por favor)

El diseño wayfinding es la creación y el desarrollo de sistemas de información con la finalidad de orientar a las personas en situaciones naturales, urbanas y arquitectónicas. Simplificando todo lo anterior en una frase, el wayfinding es una herramienta que intenta facilitar -con sus elementos- el movimiento por el que una persona se mueve.

-¿Es igual a la señalética?

-Sí y no. Digamos que la señalética puede formar parte del wayfinding, pero no se reduce solo a ello.

Lo bonito y lo amplio de la disciplina es la preocupación por el usuario. No en términos de consumidor, trabajador o inversor, sino en términos de persona. Y es que el wayfinding atiende la diversidad de personas, sus capacidades y variables físicas, culturales y sociales de igual modo.

Y ahora… vamos a pensar. Normalmente la gente suele usar la experiencia previa para orientarse pero… ¿no te ha pasado alguna vez que has entrado en un supermercado diferente o en un hospital y no sabías ni donde tenías la cara? Justo por eso existen los sistemas de wayfinding.

¿Cual es la función del wayfinding?

Su finalidad es la de informar de ambientes no familiares a las personas. Estudia la ubicación y el modo de mostrar información en puntos estratégicos. Pero ¿cómo podemos saber si un sistema es efectivo o no? Pues bien, lo primero de todo es que el sistema debe ser claro y consistente -no debe hacer pensar-, debe mostrar solo lo necesario e importante del espacio y, por tanto, eliminar cualquier estímulo irrelevante.

La aplicación de recursos de wayfinding en entornos tiene muchos beneficios para las personas:

• Evita la desorientación y el estrés
• Optimiza el tiempo en el espacio
• Genera ventajas económicas

Y hasta aquí nuestro post de hoy sobre wayfinding. ¿Conocías ya este nombrajo? ¿Te parece una herramienta en diseño tan potente como a nosotros?