COLIMA, Col. (apro).- En los últimos tres días fueron localizados los cuerpos de diez personas ejecutadas en los municipios de Comala, Armería, Tecomán y Colima. El caso de mayor impacto fue el hallazgo de los cadáveres de cinco hombres en una brecha cercana a la comunidad Lagunitas, en el municipio de Comala, que según versiones de medios locales podrían corresponder a los de un grupo de personas que habrían sido “levantadas” hace unos días en el poblado El Terrero, del mismo municipio. De acuerdo con la información, los cuerpos estaban atados de pies y manos, presentaban huellas de tortura y les había sido arrojado ácido a la cara. En oto caso, la madrugada de este jueves fue localizado el cuerpo del conductor de un taxi del sitio La Albarrada, en el interior de su vehículo, que se encontraba estacionado a la altura del motel Las Garzas, en la ciudad de Colima. La víctima había recibido varios impactos de bala en la cabeza. El miércoles por la tarde fue localizado el cuerpo sin vida de un hombre a un costado de la carretera a Coalatilla, en el municipio de Armería. De acuerdo con la versión dada a conocer por el portal de noticias Contexto Colima, el cadáver, que tenía huella de un impacto de bala en la cabeza, es de una persona de entre 35 y 40 años y no ha sido identificada. El martes 23 fueron encontrados los cuerpos de tres personas, entre ellos el de una mujer, en distintos parajes de los municipios costeros de Tecomán y Armería. Por la tarde de ese día fue reportado el cadáver de una mujer tirado en una brecha cercana a la carretera a la playa El Real, en el municipio de Tecomán, con un disparo en la cabeza. Antes, también con el tiro de gracia, apareció el cuerpo de un hombre de alrededor de 30 años en un predio cercano al rastro municipal de Armería, con huellas de tortura, cerca de las vías del ferrocarril. Por la mañana del martes fue encontrado otro hombre ejecutado en una brecha de la comunidad de Cofradía de Juárez, en Armería, envuelto en una sábana, con la cara prácticamente desfigurada por presuntos actos de tortura. La información sobre estos hechos ha trascendido a través de fuentes extraoficiales, porque el gobierno estatal mantiene una política de ocultamiento de la información sobre la mayoría de los hechos de violencia, sobre todo en el caso de los homicidios. El boletín oficial más reciente sobre la muerte de una persona fue emitido por la Secretaría de Seguridad Pública del estado el lunes 22, con el propósito de aclarar que el fallecimiento de un hombre en la vía pública había sido consecuencia de causas naturales, no por un hecho delictivo, como se especuló en algunos medios digitales ante la ausencia de información oficial. Según las cifras dadas a conocer el pasado día 20 por el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), en los primeros siete meses de este año se cometieron 338 homicidios dolosos en Colima, la cifra más alta en los registros anuales de las últimas dos décadas, e incluso superior al número de homicidios de todo el sexenio de Fernando Moreno Peña, cuando hubo 335 casos, y al de Gustavo Vázquez y Silverio Cavazos, cuando hubo 225. En el sexenio de Mario Anguiano Moreno se cometieron 940 homicidios, y su año más sangriento fue 2012, con 287 asesinatos a lo largo de los 12 meses.