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El Crowdfunding en España

03 noviembre 2014

Desde hace tiempo se está debatiendo en España acerca de la financiación colectiva, más conocida por su término inglés Crowdfunding. El denominador común en todos los debates y foros abiertos es la necesidad de una legislación que siente las bases necesarias sobre las que apoyar una tendencia de financiación que está rompiendo fronteras y que en nuestro país está teniendo un crecimiento destacado.

El sector del Crowdfunding ya cuenta con una base normativa y legislativa desde que el pasado 3 de octubre el Consejo de Ministros aprobase las normas fundamentales de la nueva regulación sobre la “Financiación Colectiva”. Aunque éste es un borrador consensuado por Gobierno, Asociaciones y Empresas del sector, todavía tiene que pasar trámite parlamentario y ser ratificado por el Senado para poder ser publicado en el BOE y así entrar en vigor, por lo que puede que se vea modificado en algún apartado.

¿Qué es el Crowdfunding?

El crowdfunding es la forma en la que ciertos proyectos son financiados o microfinanciados de forma colectiva por personas que creen en la idea de negocio o en el proyecto que se presenta. El crowdfunding nació de aquellas plataformas opensource, creadas por personas sin ánimo de lucro, y que poco después comenzaron a pedir donaciones colectivas para poder seguir con la actividad que realizaban, y de la que tanto se han beneficiado empresas y personas. Un ejemplo de esto son entidades tan conocidas como Wikipedia, Prestashop o WordPress. De ellas, hoy día solo Wikipedia acepta donaciones por su filosofía de no incluir publicidad en la web y no tiene ninguna otra forma de lucrarse, ya que Prestashop o WordPress han encontrado otras vías de capitalización en base a desarrollos propietarios y módulos oficiales. La respuesta que hubo en cuanto a las donaciones fue cuanto menos sorprendente, y a muchas otras plataformas se le ocurrió ofrecer algo (recompensas) por dichas donaciones.

A partir de entonces, esta financiación colectiva se derivó en distintos tipos que comentaremos seguidamente.

Tipos de Crowdfunding

En la actualidad los más relevantes son:

  • Crowdfunding de Recompensas. Sin duda es el más difundido y conocido. Se basa en ayudar a alguien a tener financiación para desarrollar un producto o un servicio con una preventa. Un ejemplo bastante claro podría estar en el mundo editorial. Un autor que no encontrase editorial para publicar su libro, podría solicitar mediante estos portales de financiación colectiva la precompra de sus libros para poder costearse la edición del mismo y así poder autoeditarlo. O un desarrollador de aparatos electrónicos que no tiene recursos para comprar los materiales necesarios para su fabricación, recurre a esta vía para poner a la venta una serie de ellos, sin estar producidos, y así realizar una capitalización poder lanzar su producto. Hay multitud de portales y foros donde se puede ofrecer la precompra o reserva de un producto de forma previa para capitalizar un proyecto, algunos de los más conocidos son Kickstarter e Indiegogo en el mercado internacional y Verkami en el español.
  • Portal de crowdfunding Verkami.

    Portal de crowdfunding Verkami

  • Crowdfunding de donaciones. Este tipo de financiación colectiva es utilizado por las organizaciones sin ánimo de lucro para poder capitalizar sus proyectos sociales. Además, en este caso las aportaciones económicas desinteresadas tienen el carácter de donaciones y, por tanto, cuentan con algunos incentivos como el estar sujetas a desgravaciones fiscales por parte del donante. Un ejemplo español de este tipo lo podemos encontrar en microdonaciones.net.
  • Crowdlending (Crowdfunding y Préstamos). En España esta alternativa está cada vez más de moda por la dificultad que tienen los particulares y empresas de conseguir financiación en Bancos y Cajas de Ahorros. En esta modalidad de financiación colectiva un usuario solicita en un portal una cantidad económica justificando el fin para el que la demanda. Tras estudios de viabilidad y riesgo de la persona se lanza el proyecto y cualquiera puede aportar el capital que estime oportuno a un interés marcado. De esta forma, el dueño del proyecto pueda tener la financiación procedente de micropréstamos de personas que nada tienen que ver con el mundo empresarial. Aunque pueda parecer algo nuevo, tenemos ejemplos en España como Comunitae, que llevan operando desde 2009.
  • Equity Crowdfunding (Crowdfunding de inversión). Es la modalidad que más ha crecido a nivel internacional y sobre todo que mayor crecimiento está teniendo en España, lo que ha provocado la necesidad de una legislación especial. Una empresa puede ofrecer participaciones pequeñas de un proyecto o de la empresa a cambio de dinero. Es una de las modalidades de financiación más utilizadas por las startups con un crecimiento exponencial. De este tipo de crowdfunding encontramos también ejemplos en nuestro país, como pueden ser Arboribus o ECrowd.

Normativa Española de Crowdfunding

Como comentábamos al principio, el Consejo de Ministros ya ha aprobado las bases legales fundamentales sobre las que se apoyará el sector del Crowdfunding. En el borrador solo se contemplan dos formas de financiación colectiva de las explicadas anteriormente:

  • Crowdfunding de inversión (Equity Crowdfunding)
  • Crowdlending (Crowdfunding de préstamos)

La principal novedad que contiene el borrador es la discriminación entre inversores acreditados e inversores no acreditados. De esta forma, se establecen límites diferentes según el tipo de inversor, con el objetivo de controlar o eliminar la proliferación de partidas no declaradas (dinero negro o B).

Para ser un inversor acreditado es necesario reunir dos de los siguientes condicionantes en el caso de las empresas:

  • Que la suma de sus activos supere el valor de 1 millón de euros.
  • Que el volumen de negocio (facturación) sea superior a los 2 millones de euros.
  • Que sus recursos sean superiores a la cantidad de 300.000 euros.

Para inversores particulares, las restricciones van en función de la renta y el patrimonio. En el caso de poseer una renta superior a 50.000 euros anual y un patrimonio mayor de 100.000 euros deberán ser inversores acreditados.

Los inversores no acreditados solo podrán invertir 3.000 euros en cada proyecto y un total de 10.000 euros por plataforma en cada año natural.

Otras características de la nueva Ley de Crowdfunding

Obligaciones y características de las Plataformas:

  • Las plataformas no podrán ejercer como entidades bancarias, servicios de inversión o entidades de crédito.
  • Deberán tener un domicilio social en España o en la Unión Europea.
  • Objeto social exclusivo de la actividad que van a realizar.
  • Capital social mínimo de 60.000€ euros y seguro de responsabilidad civil de 300.000 euros.
  • No podrán participar como inversores en otros proyectos de otras plataformas.
  • Podrán participar en proyectos de su propia plataforma hasta un máximo de un 10% del objetivo a financiar.

Obligaciones y características de los Promotores (los que reciben la inversión):

  • Vivir en España o cualquier estado miembro de la Unión Europea.
  • Si un proyecto llega al 90% del objetivo, si la plataforma así lo estima, podrá recibir dicho dinero.
  • Un proyecto no puede superar el 25% de su objetivo de financiación.

Límites establecidos

El límite de capitalización de un proyecto o una empresa mediante crowdfunding lo establece la futura norma en 2 millones de euros para una primera ronda de financiación. Pasado un tiempo, que se establecerá en la ley definitiva, se podrá volver a concurrir a una nueva ronda de financiación, en la misma plataforma o en otra distinta.

Reacciones a la futura norma

Desde el Sector del Crowdfunding, asociaciones y plataformas dedicadas a la financiación colectiva, han mostrado una buena acogida a la legislación de dicho sector. No en vano, han estado representadas y han participado de forma activa, teniéndose en cuenta algunas de sus ideas para el resultado final del borrador que se publicó el pasado día 3 de octubre en el Consejo de Ministros.

Sin embargo, la mayoría centran sus críticas en la problemática que suponen las medidas discriminatorias de clasificación de inversores, lo que produce una restricción por parte de algunos que pudieran invertir cantidades mayores a las establecidas (3.000 euros) y que podrían ayudar en gran medida a los promotores. Aunque desde el gobierno se insiste en la necesitad de acotar las inversiones de empresas o particulares, que no puedan justificar sus ingresos.

El crowdfunding será en el futuro uno de los sistemas de financiación más creíble y más utilizado por empresas y emprendedores, y la legislación aprobada no hace sino sentar las bases para que nadie pueda sacar provecho de forma ilegal o alegal, pretendiendo que todos los participantes lo hagan bajo las mismas reglas.