NO ESTUVO ACERTADO EL impulsivo Laporta festejando su triunfo antes de que el partido acabara. Embriagado por la sentencia exculpatoria de la Acción de Responsabilidad, el ex presidente fabuló en su comparecencia-mítin que ya estaba de nuevo en su despacho de Arístides Mallol dando órdenes, poniendo condiciones y voceando que ellos son el 'pam de net' mientras Rosell y la directiva inventaban un Barça esquelético y arruinado para desprestigiarle. Fue un discurso desafiante, ególatra, pero sobre todo contraproducente para los intereses de las 16 familias y directivos que esperaban que el triste episodio quedara zanjado. La Junta cazó la afrenta y decidió recurrir prolongando un año más un caso que se hace interminable y agotador.
EL PARTIDO seguirá en otro campo y con otro árbitro. La Junta de Bartomeu replegó líneas y apenas discutió lo que podía haber sido una sesión con un amplio debate que condujera a un escenario de acercamiento. La decisión persigue que la Audiencia reconozca los números. Sólo tres de los once puntos de la sentencia del juez Martínez Borrego no son favorables a la Junta, pero sobre todo el que se refiere a Sogecable, falto de documentación, representa 30 millones de pérdidas que darían un vuelco al caso. El Barça cree que puede hacerlo.
LA DECISIÓN TOMADA contempla a su vez la renuncia a la ejecución de los avales que se derivan de la demanda del socio Vicenç Pla, lo que libera a Laporta y a otros siete directivos a avalar 23,2 millones (2,9 cada uno). Laporta lanzó ayer que esperaba del poder magnanimidad. No hay temporada sin derrotas, dijo ayer Luis Enrique para defenderse. Tampoco la reconciliación se alcanza sin gestos de unos y otros. La sentencia del recurso será sometida a una Asamblea Extraordinaria pero el Barça ya sólo busca ingresar los 25 kilos del seguro.