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La pobreza en Venezuela se mide por dos métodos: Los ingresos comparados con la canasta alimentaria, que estudia la pobreza coyuntural y, la medición que se realiza a través de las Necesidades Básicas Insatisfechas, que estudia la pobreza estructural. En cuanto a la medición de Pobreza Estructural se utilizan variables como niños en edad escolar que no estén escolarizados, deterioro del hogar o sin acceso a servicios básicos, si viven más de 3 personas en una habitación, hogares con cabeza de familia con menos de tres grados de educación.

El ente responsable de efectuar tales mediciones en Venezuela, el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó los datos de pobreza para el primer trimestre de 2015 luego de un receso de año y medio sin revelar cifras al respecto. 92.663 personas se sumaron a la pobreza entre el segundo semestre de 2014 y el primer semestre de 2015 de los cuales 62.407 personas son Pobres No Extremos y 8.653 personas disminuyeron el rango de Pobres Extremos. Es decir, hasta el primer trimestre del 2015, 33,1% de los venezolanos se encuentran en situación de pobreza.

Por otro lado, el ministro de Planificación y Vicepresidente para la Planificación y el Conocimiento, Ricardo Menéndez, anunció el pasado mes de agosto que la pobreza general se ubicaba en 18,3% y la pobreza extrema en 4,4%, datos que no coinciden con las últimas mediciones realizadas por el INE. En torno a eso, el Gobierno Nacional presentó en junio de forma voluntaria un informe al alto nivel de la Organización de las Naciones Unidas sobre desarrollo sustentable, en el que recoge las principales acciones para la disminución de la pobreza  desde el disfrute de los derechos humanos y el desarrollo por medio de las Misiones y Grandes Misiones Sociales.

El informe señala que 95,4% de los venezolanos comieron tres y más veces al día, 900 mil personas recibieron una comida en 6 mil casas de alimentación y que para el año 2006 se había cumplido con la reducción del 50% de la pobreza extrema hasta llegar a 11,1%, este último dato presenta algunas incongruencias con los soportes investigados por Transparencia Venezuela en el Informe para el Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas en el que destaca que para el 2013 la pobreza se incrementó 6,1% pasando del 21,2% en 2012 a 27,3% en el segundo semestre de 2013. De manera que en el transcurso de esos años las políticas sociales implementadas por la gestión del presidente Hugo Chávez actuaron de manera focalizada y de forma paliativa en algunos sectores de la población y, por el contrario, no lograron revertir los aspectos medulares que conlleva la pobreza. Se suma la disminución de ingresos que tuvo el país para los años 2013 – 2015  que incidió en el aumento de hogares en pobreza extrema.

Ante este escenario, el INE suspendió abruptamente las publicaciones oficiales de tan importante indicador social. Del mismo modo otras publicaciones cesaron, como el Boletín Epidemiológico Semanal de la cartera ministerial de salud, lo que complejiza el problema de la pobreza al limitar investigaciones, diagnósticos y posibles ajustes a las políticas implementadas.

Hoy, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza,  preocupa a Transparencia Venezuela que las misiones, empleadas entre muchas otras cosas para mejorar las condiciones de vida de grupos más vulnerables y disminuir la pobreza, no constituyan una política social de Estado con enfoque en derechos humanos, tengan gran vinculación con el Gobierno Nacional y estén alineadas por la discrecionalidad lo que favorece la opacidad y la corrupción, y por consiguiente, pierdan su objeto social que debe ser el descenso de los índices de pobreza en Venezuela y un nivel de vida digno para las poblaciones más desvalidas.

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