Las autoridades informaron ayer que el cadáver de una mujer que había sido hallado en estado de putrefacción el pasado 1 de abril en San Lorenzo e identificado como el de la empleada de comedores escolares Ilia Millán Meléndez presentaba heridas de arma blanca en el cuello y brazos y golpes en la espalda, entre otros traumas, confirmándose que fue un asesinato.
Otros tres casos de muertes de mujeres, que al igual que el de Millán Meléndez la Policía sospecha que fueron víctimas de violencia machista, aguardan por los resultados de las autopsias del Negociado de Ciencias Forenses.
EL VOCERO supo que de estos resultados depende que los investigadores puedan adelantar sus pesquisas, al sospechar que también se trata de casos de violencia de género.
El compañero sentimental de Millán Meléndez fue intervenido el sábado en Culebra por agentes de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Caguas. Posteriormente fue interrogado y según su versión no la había visto desde que discutieron en la noche del 28 de marzo o la madrugada del 29 en un bar en Fajardo.
El automóvil del individuo fue ocupado en el estacionamiento del servicio de lanchas en Fajardo para ser sometido a análisis.
Según las estadísticas de la Policía, desde el 1 de enero hasta el 14 de abril se habían registrado 210 asesinatos, entre los cuales10 de las víctimas son mujeres y de ese número tres casos fueron calificados de violencia doméstica.
En esa estadística no se incluye el asesinato de Millán Meléndez, quien tenía 44 años y trabajaba en el comedor de la escuela superior Dr. Santiago Veve Calzada, en Fajardo. Este diario supo que la investigación abarca varios ángulos, siendo el principal la violencia de género.
En el aire los casos de otras mujeres
Otras tres muertes violentas de mujeres siguen en el limbo, en espera de los resultados de las autopsias en Ciencias Forenses. De confirmarse las teorías en los casos de Millán Meléndez y las otras tres, sumarían siete las víctimas de la violencia de género desde que comenzó el año.
El comisionado interino de la Policía, Henry Escalera Rivera, sostuvo que se han reunido en las últimas dos semanas con la dirección de Ciencias Forenses y que los casos siguen pendientes de diversos resultados de pruebas enviadas a laboratorios en Estados Unidos.
Entre los casos está el de otra empleada de comedores escolares, Jackeline Vega Sánchez, cuyo cadáver en avanzado estado de descomposición fue hallado a principios de febrero en una bolsa plástica colocada en el baúl de su automóvil.
Vega Sánchez fue informada como desaparecida el 30 de enero y una semana después su cuerpo sin vida fue hallado, cuando un ciudadano alertó a las autoridades del olor fétido que salía del baúl de un Ford Fiesta que llevaba varios días estacionado frente al condominio Madrid Plaza, en Río Piedras.
El exmarido de Vega Sánchez, con quien había procreado dos hijas ya adultas y con quien ella supuestamente estaba compartiendo nuevamente después de años de separación, fue llevado a las oficinas del CIC en el Cuartel General, donde comenzó a llorar mientras aguardaba por ser entrevistado.
De otro lado, la muerte de Carmen Iris Domínguez Pérez, cuyo cadáver fue hallado el 2 de febrero en un puente en el sector Puerto Viejo en la Playa de Ponce, es otro de los casos sin esclarecer. Su expareja Reinaldo Torres, con quien había compartido hasta la madrugada de ese día, fue entrevistado y en su guagua se halló la cartera de la mujer.
Posteriormente, Torres fue acusado de cometer actos lascivos contra la hija de 12 años de Domínguez Pérez.
Hasta ayer tampoco se conocía la causa de la muerte de la joven Yiliana Meléndez, de 20 años y madre de dos niños.
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