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Reportaje:

Las propiedades curativas del arte

Padres de niños pacientes del hospital de Santiago participan en un proyecto de construcción de maquetas de habitaciones con diseño y colores atractivos

La experiencia de pasar por un hospital es algo que nos ocurre a casi todos en algún momento de nuestras vidas, y seguramente quien ha tenido que afrontar una temporada más o menos larga en la habitación de un centro sanitario se ha planteado cambiar el color de las paredes o añadir algún mueble para darle un carácter más hogareño a las frías estancias del hospital. Ahora este sueño comienza a convertirse en realidad gracias a un proyecto que se está desarrollando en el hospital clínico de Santiago.

La iniciativa corresponde a la asociación cultural Sen Marco, con la colaboración del Centro Galego de Arte Contemporánea (CGAC). El proyecto Algo más de color pretende poner el arte contemporáneo y el diseño al servicio de los niños hospitalizados y sus familiares durante una situación que siempre es difícil de afrontar para una familia. Clara Rodríguez, miembro de Sen Marco, explica que el trabajo comenzó a hacerse efectivo hace un mes y consiste en mantener conversaciones con los padres de los niños ingresados en el área de lactantes del hospital para que cuenten cómo les gustaría que fuesen las habitaciones en las que están ingresados sus hijos.

"Por el momento la gente está respondiendo muy bien al proyecto"
"Es una experiencia innovadora y vamos a aprender mucho sobre los pacientes"

"Por el momento la gente está respondiendo muy bien", explica Rodríguez, "aunque, como es lógico, también hay gente que no quiere participar". Los miembros de la asociación explican a los padres de los niños ingresados que la iniciativa pretende contribuir a mejorar las instalaciones del hospital y a que los arquitectos tengan en cuenta las aportaciones de los pacientes para construir espacios más humanizados en el futuro.

Una vez que se recogen las opiniones de los padres, los miembros de Sen Marco construyen una maqueta en la que plasman las ideas que les han comunicado. Trabajan durante el fin de semana y suelen realizar dos maquetas en cada uno de ellos. Por lo que se ve en los resultados obtenidos, los padres hacen mucha incidencia en que las habitaciones deben contar con muchos más colores para que los niños no tengan que pasar tanto tiempo en una estancia pintada con un color gris muy frío. "También nos encontramos con gente que dice que en realidad la cuestión del entorno no es tan importante, pero esto ocurre más bien con los que pasan poco tiempo en el hospital. Pronto empezaremos a trabajar con niños del área de Oncología y ahí seguro que vamos a encontrar más implicación porque ellos sí que pasan más tiempo ingresados", explica Rodríguez.

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Una vez que se finalice la fase inicial del proyecto se organizará una exposición en el propio hospital con todas las maquetas realizadas. Además, se pretende mostrar este material en varios espacios expositivos de la comunidad autónoma. Un catálogo documental muy extenso recogerá el proceso de investigación desarrollado a lo largo de todo el proyecto. Rodríguez destaca la colaboración que han tenido hasta ahora por parte del personal del hospital, especialmente por el doctor Martinón, responsable de Pediatría, quien "nos dio su apoyo desde el principio".

El diseño de la terapia que se pone en marcha con este proyecto corre a cargo de la artista lucense Mónica Alonso. Desde hace años ha investigado las propiedades curativas del color y precisamente los "dormitorios terapéuticos" que realizó en los años 90 fueron los que llevaron a la asociación Sen Marco a contactar con ella para que diseñase la terapia que ahora se está aplicando. "La idea es que los pacientes diseñen una habitación a su gusto y que lleguen a sentir que han estado ingresados en la habitación imaginada y no en la real", explica Alonso.

No es la primera vez que la artista consigue aplicar de forma práctica sus teorías, ya que diseñó el interior de un centro de día en Maceda (Ourense) y a partir de ahora se plantea orientar toda su carrera artística a trabajar como terapeuta utilizando sus técnicas artísticas. "Es una experiencia totalmente innovadora y vamos a aprender mucho dialogando con los pacientes para aplicar sus ideas en las maquetas", indica la artista, quien está permanentemente en contacto con los miembros de Sen Marco para llevar a cabo los deseos de los pacientes durante la construcción de las maquetas.

El objetivo es que si la experiencia funciona pueda trasladarse a otros centros de Galicia. Uno de los puntos en los que incide Alonso es que el coste de llevar a cabo los deseos de los pacientes no sea muy elevado para que el proyecto sea viable. "Es un trabajo artístico pero que te acerca mucho a la psicología. Se trata de una terapia aplicada al espectador y al paciente", concluye.

Una de las maquetas realizadas por los miembros de la asociación Sen Marco siguiendo instrucciones de pacientes.
Una de las maquetas realizadas por los miembros de la asociación Sen Marco siguiendo instrucciones de pacientes.

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