Luis Krug, hijo de austriaco y española, nació en Taiwán en 1975 y con su familia vivió en Marruecos, Alemania, Turquía, estudió en Estados Unidos... En el 2001 fundó la que llegó a ser la mayor tienda de productos de electrónica por internet en Alemania; la vendió y volvió a repetir la historia con Redcoon (que en el 2011 se vendió a Mediamarkt). Krug había desinvertido en el 2006 cuando decidió instalarse en Barcelona. “Hice una buena salida”, y volvió a empezar poniendo en práctica todo lo que había aprendido en comercio electrónico. Junto a su socio Emrah Hizari, ingeniero turco, crearon Ooferton, de ventas flash de un día, que en el 2015 vendieron a Pixmania.
Ahora Krug está centrado en Incubout: una plataforma, creada en el 2013, que proporciona herramientas de comercio electrónico a las pymes, y que está enfocada como marca blanca: busca socios locales –de telecomunicaciones, paquetería, bancos– para que la desarrollen en cada país. En España es Correos quien comercializa la plataforma con la marca Comandia. La solución permite “lanzar, operar y escalar una tienda on line en media hora. Incubout publica sus productos en otros 50 mercados on line (como Amazon, eBay, que es donde está el tráfico) y gestiona su operativa diaria”.
Incubout tiene como socio minoritario a Active Partners (también en Ooferton) para impulsar su desarrollo. Y ya ha lanzado una nueva solución “para la última milla que permite gestionar entregas inmediatas”: ha firmado con 004-arabia.com para implantarlo en Doha, Abu Dabi y Dubái, y ultima acuerdos en Hong Kong y Singapur.
La plataforma tiene versiones en inglés, francés, pero también chino, indonesio, árabe, turco, ruso... “Y 115 pasarelas de pago integradas, con monedas locales”. En total, tienen más de 12.000 comercios usuarios en el mundo, que mueven ventas agregadas de más de 500 millones.
“Nos posicionamos en Asia y Oriente Medio”, explica Krug. “Las soluciones de comercio electrónico empiezan a ser una commodity. Con nuestra plataforma puedes gestionar de diez a mil paquetes diarios, con muy poca inversión”. Para testear, han creado varios comercios electrónicos: venden bicicletas, o sombreros: “Es importante conocer todo el proceso”. Incubout emplea a 11 personas en Barcelona, y 5 programadores en Turquía, además de un comercial en Hong Kong. “La empresa está en beneficios desde el segundo año; en el 2015 vendió más de 600.000 euros y este 2016 esperamos doblar”. A 5 años, prevé facturar más de 12 millones.