Mediterránea

Menorca es uno de los paraísos del Mediterráneo occidental, una perla bañada por un mar apacible y protegida por un clima amable. Una banda cromática infinita permite ver como se confunden el azul de su cielo con el turquesa de sus aguas, el verde oscuro de sus bosques, el marrón de sus rocas y el blanco de sus playas.

Con 216 kilómetros de costa, Menorca cuenta con más de 70 playas, de fina arena blanca en el sur y de rojizos tonos en las más agrestes calas del norte. Su variedad geológica la convierte en un paraje de indudable belleza en el que contrastan salvajes acantilados con suaves arenales. Además, los puertos nos muestran una tradición marinera que sigue como medio de vida para muchos y como diversión navegante para otros. Menorca vive de cara al mar y sus faros repartidos por su geografía nos lo recuerdan.


Todo este paisaje acoge con alegría a los viajeros y se adapta a sus necesidades. Las familias encuentran aquí un turismo lleno de propuestas y facilidades para disfrutar con niños. De la misma manera, las parejas o grupos de amigos pueden hospedarse en establecimientos “only adults” y disfrutar de un animado ocio nocturno como colofón a un día de playa y excursiones.

 
Imágenes relacionadas